Nombre: ¡Noemí!
Categoría: Panteón Familiar
Data: 1935/36
Ubicación: Sección 13, División 2
Constructor: L. F. Zetti
Características: Sobrio panteón revestido íntegramente en granito negro. La
utilización de formas geométricas puras y el escalonamiento del frontis le dan
un aire Art Decó, que contrasta con la decoración de la puerta, donde se
observan las clásicas referencias simbólicas a las hojas de acanto y amapolas;
habituales en el arte funerario. A ambos lados del acceso aparecen varias
placas de bronce que aluden a Noemí Carbone de Castro, fallecida el 8 de abril
de 1935; y cuyo deceso motivó la construcción del panteón:
“¡Noemí!
Tu has vivido lo que viven
las rosas,
El espacio de una mañana
Tus amigas
8/4/1935”
Además de las placas dedicadas a Noemí, aparecen otras que evocan la figura
del prestigioso escribano y dirigente racinguista Luis Carbone (1883- 1945).
Dice sobre él Paso Viola Frers:
…”Jugador de las primeras
formaciones , hermano de Alejandro y también presidente como él, aunque en
mayor cantidad de oportunidades. Ocupó la presidencia en 1911, 1915, 1916,
1918, 1921, 1924, 1939, 1940, y 1941.
Como futbolista tuvo una
actuación breve, pero su aporte dirigencial ha sido uno de los más prolíficos
de la historia del club. Se deben a su eficaz conducción los primeros pasos
fundamentales que determinaron el crecimiento y engrandecimiento de Racing (…).
Representando al Racing
Club, a través de su accionar directivo nacional; pergenia la modalidad
disciplinar y efectiva para cumplir con la meta de lograr el nivel de juego
asociado al fútbol criollo. Es trascendental su aporte, ya que fue elegido para
instituir un estilo de juego que, con el transcurso de los años le permitió al
Fútbol Argentino, ganarse el aprecio y el respeto del mundo.
Curiosamente falleció
trágicamente el día de su cumpleaños, un 14 de enero a la edad de 62 años”…[1]
La muerte de Carbone, tal como dice Paso Viola Frers; fue curiosamente
trágica ya que se ahogó en las aguas del Arroyo San Juan, un afluente del Río
Uruguay; en una zona conocida como “Barra de San juan”, muy cerca de la Estancia
de Aaron Anchorena, que actualmente es la residencia de descanso de los
Presidentes de Uruguay. Así narraba crítica el luctuoso acontecimiento:
…”El Sr Carbone llegó al
lugar donde se produjo el accidente que le costó la vida en el Yate Chiqui, en
compañía de los Sres José Feillú Rodríguez Barro y Urano Menino. El propósito
de los tripulantes de la embarcación era pasar allí el fin de semana y además agasajar
al Sr Carbone que hoy cumplía 62 años. La excursión pues, se había organizado
en honor de la víctima.
Según informan los que
acompañaban al Sr Carbone, el accidente se produjo encontrándose este y el Sr
Rodríguez Barro en tierra. Carbone quiso enjuagarse las manos y para eso se
acercó al borde de un arroyo en un lugar donde no existe playa y la ribera se
corta casi perpendicularmente con el lecho del río (…).
Al perder el pie cayó al agua.
Intentó nadar, pero las ropas evidentemente dificultaron su movimiento. Además
agravó el accidente hasta convertirlo en tragedia la existencia de un pozo,
cuyo remolino arrastró al ex presidente de Racing”…[2]
Cabe destacar que Rodríguez Barro casi pierde la vida al arrojarse al río e
intentar salvarlo. Afortunadamente para él, pudo llegar a la orilla y
recuperarse varias horas más tarde. El cuerpo de Carbone recién fue encontrado
al día siguiente, y el 16 de enero se llevó a cabo su sepelio ante una
muchedumbre muy conmovida por lo sucedido.
![]() |
Diario Crítica 15 de enero de 1945 |
[1] Paso Viola Frers, Luis Fernando;
“Racing, La Historia del Primer mas grande (1898- 1931)”
[2] Diario Crítica 15/01/1945
No hay comentarios.:
Publicar un comentario